Estas sentencias se suman a otras dos favorables que elevan a seis las personas que han visto reconocidos sus derechos como comuneros y están pendientes de resolución judicial otros dos más
La Audiencia Provincial de Ourense acaba de reconocer a cuatro vecinos más su derecho a ser miembros de la Junta de Montes en Mano Común de Portela y Trigal. Una sentencia que se suma a otras dos emitidas recientemente, elevando así a seis el número de personas cuya condición de comuneros ha de ser reconocida por la Comunidad de Montes. Otras dos siguen a la espera de sentencia para que se le puedan hacer valer también dicho derecho.
El fallo de la sentencia la Audiencia Provincial recoge que, tras valorar todas las manifestaciones vertidas por los testigos que han declarado, conjuntamente al resto de actividad probatoria practicada —documentación aportada de que los demandantes han permanecido empadronados de manera ininterrumpida en Portela do Trigal desde 2017—, estas cuatro personas “residen efectivamente en el lugar y, en consecuencia, ha de serle reconocida su condición de comuneros”.
De este modo, el fallo de la Audiencia Provincial desestima la apelación de la Junta de Montes contra estos cuatro vecinos y les otorga el derecho a pertenecer como comuneros a la Junta de Montes en Mano Común de Portela y Trigal, condición que les había sido denegada, aunque posteriormente reconocida por el Juzgado de Instrucción número 2 de O Barco.
La Comunidad de Montes recurrió esta sentencia de primera instancia, pero la Audiencia no estimó su apelación.
A la hora de emitir su sentencia, la Audiencia Provincial ha tenido en cuenta las pruebas documentales aportadas por los demandantes que evidencian que residen manera efectiva en la zona tales como certificados de empadronamientos, recibos de basura o luz o certificados del censo electoral, entre otros.
La Audiencia Provincial condena, además, al pago de costas procesales a la Junta de Montes Portela-Trigal.
El conflicto se inició en 2017 cuando los vecinos demandantes intentaron entrar a formar parte de la comunidad de montes como comuneros, momento desde el que la actual directiva impidió la realización de la asamblea para la toma de decisión. El procedimiento judicial ha sido el único modo de que sus demandas fuesen analizadas y reconocidas sus pretensiones.
