La manifestación fue respaldada por representantes de los concellos de todos los colores políticos y estuvo presente el delegado de la Xunta
Grito unánime contra el paralización cautelar dictada por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) de actividad de la mina de coltán de Penouta (la única en sus características de Europa) en la manifestación desarrollada hoy en Viana do Bolo.
Trabajadoras y trabajadores, al compás de bombos y bocinas, corearon frases como «A minería é vida, Penouta non se pecha», «A nosa mina, non contamina», además de portar un buen número de pancartas que hicieron alusión a que «A mina danos vida», «Penouta somos todos» o «Queremos traballar e non emigrar».
A la movilización, concentrada en la Praza do Concello, y que recorrió también un tramo de la travesía se unieron todos los partidos políticos con representantes de numerosos municipios, ayuntamientos de la zona y de la vecina de Valdeorras, colectivos, vecinos y vecinas.
Acudieron el delegado de la Xunta, Gabriel Alén; el alcalde de Viana, Andrés Montesinos; las alcaldesas de Vilariño de Conso y Larouco, Melisa Macía y Patricia Lamela, respectivamente; el alcalde de O Bolo, Alberto Vázquez y el de A Veiga, Juan Anta, entre otras muchas personas.
Trabajadores de la mina de Penouta solicitaron que el TSXG revierta la decisión judicial de paralización de la actividad en la mina.
Además, anunciaron que se movilizarán frente al mismo el próximo 9 de noviembre, en A Coruña.
