Julio Pérez y Yolanda Pereira Barja son los propietarios de este establecimiento hostelero de la calle San Mauro: «Aquí es posible degustar tapas clásicas y diferentes», dicen
Agarimo Tapería, situada en la calle San Mauro de O Barco, es un establecimiento hostelero donde las tapas más variadas y deliciosas son la excelencia de la casa. Abrió sus puertas hace año y medio de la mano de Yolanda Pereira Barja y Julio Pérez Arias, apostando por la gastronomía, el buen tapeo y la historia de un negocio que fue muy popular en el pasado, recuperada a través de su nombre original (Agarimo).
En Agarimo Tapería es posible degustar tapas con una amplia carta a elegir, clásicas y diferentes. Algunas marcan la diferencia como «las ancas de rana, los caracoles, mollejas y oreja, además de nuestra propia salsa brava, que la hacemos aquí», relata Yolanda Pereira.
Por el nombre de este establecimiento hostelero, «todo el mundo ya sabe donde está Agarimo Tapería«, cuenta Julio Pérez, que resalta el valor de la zona histórica de O Barco si bien, estima, «hay que potenciarla aún más».
«Agarimo Tapería está en una calle tranquila de O Barco. Es peatonal. La gente está cómoda y a gusto. Lo ideal es que hubiese más bares y establecimientos, para revitalizar el sector en esta zona y la vida del barrio», apunta Julio Pérez.
Para contribuir al movimiento, Agarimo Tapería promueve eventos, con la colaboración de los vecinos de la calle San Mauro, como la pasada fiesta de San Juan, que fue todo un éxito, y la Fiesta del Verano que tendrá lugar el 24 de julio.
Agarimo Tapería también pretende contribuir a mantener la tradición de ir de tapas. «No hay tanto tapeo como antiguamente, pero se va manteniendo. Y aquí tenemos de todo, también platos propios de la zona como la zorza y la oreja. Vamos cambiando y alternando cada día las tapas. Estamos contentos», expresa Julio Pérez.
Yolanda Pereira Barja y Julio Pérez Arias decidieron emprender en el sector porque les gusta el mundo de la hostelería y como una salida profesional. Yolanda ya tenía experiencia en el sector y Julio se puso al día. Lo que inicialmente les parecía lanzarse a la aventura se convirtió en un reto conseguido.
«Empezar de cero fue difícil. Comenzamos con un poco de miedo pues el establecimiento llevaba cerrado varios años. Pero ahora, después de año y medio de actividad, ya está plenamente consolidado y funciona estupendamente», valoran ambos.
Ambos son además los papás de Leo Pérez, el piloto barquense de 12 años, fenómeno del automovilismo Mini, cuya foto preside la barra del bar. «Estamos orgullosos», concluyen.
Agarimo Tapería, es la alternativa para ir de tapas en O Barco.
