«La piscina climatizada está pendiente de la evolución de las restricciones»

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El alcalde de O Barco, Alfredo García, indica que se elabora un estudio sobre cómo podrá ser la reapertura de las renovadas instalaciones

El alcalde de O Barco, Alfredo García, mantuvo en las últimas semanas un encuentro con la empresa que gestionará la piscina climatizada. Señaló que la reapertura está pendiente de la evolución de las restricciones, derivadas de los nuevos tiempos de covid, y de un estudio.

«Estamos administrando servicios con el dinero público, de todos. Hay que ser muy conscientes de lo que se va a poder a hacer en las piscinas», valora en alusión a que con elevadas restricciones, el coste de funcionamiento de la piscina «sería el mismo, sea para 10 o para 100 personas, esté llena de personas o no. Sin embargo, los ingresos no serían iguales».

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Alfredo García insiste en que hay que ver «qué actividades se pueden hacer y cuáles no. Estamos esperando el cambio de la Xunta en materia de restricciones sanitarias, que las regulará de nuevo y que, ahora mismo, son muchas».

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El estudio va a ofrecer una «fotografía» de la situación real, de cuántas personas podrían entrar en las instalaciones y qué actividades son viables. A partir de ahí, «también se sabrá cuánto le va a costar a las arcas de Concello de O Barco», puntualiza.

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El alcalde de O Barco destaca la reticencia de los ciudadanos a permanecer en interiores, debido a la pandemia, tal y como se ha constatado en otro tipo de actividades como las relacionadas con el cine, de modo que habrá que ver cómo afecta este nuevo «hábito» a servicios de la piscina climatizada como el gimnasio.

La piscina climatiza permanece cerradas desde 2018, después de que la anterior concesionaria solicitase la rescisión del contrato. En enero de 2020, la nueva adjudicataria firmaba el contrato actual.

Empieza la cuenta atrás de la reapertura, eso sí, el alcalde señala «cada vez soy menos partidario de dar fechas de este y otros servicios porque no siempre se pueden cumplir», concluye el regidor de O Barco, refiriéndose a los imprevistos que pueden surgir en el camino de obras y servicios.