«El Boteiro es más que un personaje, es un ser y es lo primero que me sale al pintar», afirma el artista del Entroido, natural de Viana do Bolo
David Álvarez González (David AG, de nombre artístico), ilustrador de Viana do Bolo, es uno de los artistas que ahonda en la esencia del Entroido. Dibuja con alma de Boteiro, figura ancestral que admira, respeta y que representa un todo, algo que trasciende la máscara o personaje. «Es un ser» —puntualiza—, vivo, que anida en su interior, inspira y mueve los trazos de sus dibujos sobre el papel.
El Entroido, del que se ha empapado desde que era niño, por la pertenencia a una tierra que mantiene la pureza de esta manifestación cultural, forma parte de su vida. «Pienso en el Entroido todos los días del año», expresa. Para él esta tradición es sinónimo de «alegría, felicidad, identidad», emociones que afloran en su proceso creativo. «Cada vez que pinto un boteiro me siento bien», dice.
David Álvarez González no se centra exclusivamente en el Entroido de Viana do Bolo. También profundiza en otras figuras del Entroido gallego e incluso de Portugal. Los Cigarróns de Verín, los Peliqueiros de Laza, las Pantallas de Xinzo, Caretos de Arcas (Bragança), son solo algunos de los personajes que inmortaliza a través de sus dibujos, cargados con el sello diferenciador y personal del autor.
El hecho de vivir el Entroido por dentro, en primera persona, pesa y mucho a la hora de crear. David forma parte del Folión Alternativo de Viana, donde toca la caja y otros instrumentos. También es miembro de la Comparsa recuperada en 2019 (mediante la escenificación de la ronda, brindis y disputa), una participación muy activa que suma en la conservación de la tradición cultural por excelencia. Además, es autor del cartel de la ViBoMask 2023 y de una serie de 90 dibujos relacionados con la gran Mascarada Ibérica.
Un ilustrador enamorado del Entroido, pasión que aflora en cada dibujo, y que ahora aspira a proyectar ante el público. Uno de sus proyectos inmediatos es dar a conocer su obra y lo hará con una exposición la próxima primavera en Bragança (Portugal), que realizará conjuntamente con otro artista ya consagrado, Piquico.
V de Cerca: ¿Cómo es tu proceso creativo, cuál es tu estilo?
Intento hacer lo que me sale a la primera, no borrar, algo rápido. Suelo tomar referencias de fotografías. El Entroido es lo que más me llama, sobre todo los Boteiros. Hago los dibujos a mano, a lápiz o portaminas, y después aplico determinados tratamientos digitales. Me defino como un artista de Entroido. Me suelen decir que el estilo es parecido al de Castelao, pues los dibujos son en líneas finas y sueltas.
V de Cerca: ¿Qué es lo que más te gusta en el mundo del dibujo y a qué aspiras?
Me gusta mucho que a medida que vas creando aprendes algo nuevo, es un aprendizaje constante. Además, cuando me pongo a dibujar se me pasa el tiempo volando, estoy en mi mundo, disfruto. Aspiro a trabajar por mi cuenta, montar mi propio taller de dibujo y que la gente conozca mi obra.
Valdeorras de Cerca: No es lo mismo vivir el Entroido desde la «barrera» que desde dentro. ¿Eso influye en tu obra?
Claro. Participar en el Entroido da otra visión. Me encanta ver el conjunto de los folións con sus personajes, danzando, moviéndose.
V de Cerca: El Entroido corre por tus venas, lo llevas en la sangre y hay que sentirlo para plasmarlo en pintura y dibujos, ¿qué es para tí?
Todos los días del año pienso en el Entroido. Es un poco tortura (se ríe), porque siempre lo estoy esperando. Ahora, ya está ahí. Para mí el Entroido es un momento de felicidad, es vida, colorido; es el momento más importante del año.
V de Cerca: El Boteiro es la «estrella» de tu pintura, ¿qué visión tienes de esta figura y como la transmites en tus dibujos?
Si me pongo a pintar, lo primero que me sale siempre es un Boteiro. Es un ser. No es una persona que va dentro de un «disfraz». Es un ser en sí, que impone respeto, con una personalidad propia y con un carácter forjado. Transmito como artista en el trazo, siempre suelto, en los colores y en las formas. A veces deformo un poco a los Boteiros, como si fuesen más largos, porque es lo que me transmiten. Cuando los ves correr o saltar parece que toman posiciones como si no fueran humanas. No hay dos boteiros iguales, cada uno tiene su identidad.
V de Cerca: Un sueño
Ser Boteiro, transformarme y dejar de ser yo para fundirme con el personaje.
