Los peregrinos pueden elegir tomar la senda original o la alternativa
El Camino de Invierno entre Vilamartín y A Rúa ofrece ahora dos alternativas, la original que discurre por la vieja N-536, —acondicionada en su día en el término de Vilamartín pero sin seguridad en el tramo de A Rúa— y un sendero alternativo que parte de Miguel de Outeiro, recientemente señalizado.
El peregrino puede elegir. Un cartel plantea las dos opciones, si bien advierte de la peligrosidad de escoger el tramo original.
El tramo original bordea la carretera
El tramo original consta de un camino que discurre al borde de la carretera, protegido del riesgo de atropellos solo en el término de Vilamartín. Abarca 1.386 metros.
La nueva señalización alerta sobre la peligrosidad de este tramo por discurrir junto a la carretera sin medidas de protección en el término de A Rúa.
El Camino de Invierno cuenta en este recorrido con buenas vistas hacia el río Sil, Vilamartín y la presa de Valencia do Sil. No tiene dificultad para el caminante.
Pese a la desventaja de la inseguridad en el término de A Rúa, sigue siendo utilizado por los peregrinos, aún cuando el tramo alternativo comienza a cobrar fuerza y registra un notable movimiento en las últimas semanas.
El sendero alternativo
El sendero alternativo del Camino de Invierno entre Vilamartín y A Rúa se toma en San Miguel de Outeiro.
Se caracteriza por hermosos paisajes rodeados de árboles de todas las especies, en las que abundan castaños, madroños, encinas y otras, además de viñedos y bonitas vistas hacia A Rúa y Vilamartín.
La nueva senda alternativa consta de 1.722 metros y un pequeño tramo de subida de dificultad media.
Para tomar la senda hay que cruzar la carretera en un punto de poca visibilidad para los caminantes, bajo el puente de la N-120.
En los últimos días esta opción ha comenzado a ser elegida, no solo por peregrinos, sino por personas que desean pasear en contacto con la naturaleza.
El recorrido en los dos tramos depara bellas imágenes.
Pasando por alto el desencuentro de los Concellos de Vilamartín y A Rúa por la apertura de la senda alternativa, un paseo a través de ambas sendas refuerza su realidad: el Camino de Invierno está rodeado de belleza por sus cuatro costados, en todas sus vertientes, sendas y variantes.