El Concello de A Rúa ya tiene vía libre para optar a subvenciones

Un pleno de A Rúa
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El Concello de A Rúa realizó la liquidación de la cuenta general de 2018 cuyo plazo de exposición pública acaba hoy. Este trámite permite a la institución local solicitar subvenciones, tal y como indicó el alcalde, Álvaro Fernández, en el pleno ordinario del mes de enero. El regidor señaló que «fue una lotería, fruto de la suerte porque se trabajó a ciegas. Las cuentas no estaban al día».

Álvaro Fernández manifestó que, a día de hoy, están apareciendo facturas que reclaman proveedores, «sin contabilizar, de las que no teníamos constancia». Por ello, «fue una suerte poder cerrar ese ejercicio».

Recordó que «se perdieron subvenciones en los últimos meses a las que no podíamos optar porque las cuentas no estaban al día».

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Por su parte, el concejal del RUA José Vicente Solarat dejó claro en la sesión plenaria de enero que lo que hay que celebrar es que se pudiese aprobar la liquidación de las cuentas de 2018 porque «en seis o siete meses, hemos conseguido presentar la liquidación de 2018. Esto nos permite volver a estar en la línea de salida de las subvenciones», recordando que no se pudo optar a alguna relacionada con el Camino de Invierno debido a la ausencia del citado trámite de liquidación.

Insistió que, con independencia del resultado que al final se obtenga en el 2019, para saber cuál es la situación real del Ayuntamiento, la liquidación de 2018 da vía libre a las solicitudes de subvenciones. «Es necesario acabar cuanto antes también con la cuenta de 2019 para realizar el presupuesto de 2020 y saber por dónde tenemos que ir», añadió.

Por su parte, el portavoz del PSOE, Luis Fernández Gudiña, hizo una lectura positiva de la liquidación y el Informe de Intervención, desde el punto de vista de la gestión del anterior bipartito —PSOE-BNG— pues considera que refleja una mejora de la situación económica durante el ejercicio en que gobernó el bipartito.

«Hubo un interés del anterior grupo de gobierno por controlar el gasto y eso lo refleja intervención», expresó Fernández Gudiña. En este sentido, cita datos como un remanente de tesorería positivo, mayor capacidad de financiación, que cumple con una regla de gasto positiva y que revela que la deuda viva —la que tiene el Concello con los bancos— es de 64 por ciento, muy por debajo de lo recomendado —el 75 por ciento—la más baja de los últimos años».

Al margen de las lecturas de cada grupo, está claro que el Concello de A Rúa puede aprovechar ahora una inyección económica que revierta en el municipio fruto de subvenciones.