PP y Riada Cidadá votaron en contra , el BNG optó por la abstención y hubo discrepacias sobre las aportaciones de otras administraciones
O Barco celebró uno de los plenos más importantes del año, el del presupuesto municipal, aprobado en solitario con los 10 votos a favor de los concejales del grupo de gobierno socialista. Los cinco ediles del PP y el de Riada Cidadá votaron en contra. El BNG se abstuvo. La cuenta municipal asciende a 9.651.296 euros.
La sesión arrancó con unas palabras del alcalde, Alfredo García, lamentando el fallecimiento de Manuel Núñez Docampo, padre de los exconcejales María Victoria Núñez y Manuel Núñez.
El debate se desarrolló sin grandes sobresaltos, ni controversias, ceñido a las cifras de inversiones y, de algún modo, «eclipsado» por el que le seguiría después, la discusión de densas mociones a cada una de las cuales se les dio estricta lectura, con puntos y comas.
Mención especial en esta sesión plenaria tuvo el manifiesto conjunto consensuado por los cuatro grupos de la Corporación para el Día de la Mujer, un documento que se leerá a la puerta de la Casa Consistorial el próximo 8 de marzo —sin concentraciones—, en defensa de la igualdad, contra la violencia de género y con un reconocimiento expreso a las mujeres, el colectivo de la población al que más le afectó la crisis derivada de la pandemia.
Aurentino Alonso (PSOE): «es sinónimo de gestión»
El portavoz del PSOE, Aurentino Alonso, abrió la sesión desgranando el presupuesto municipal para 2021. Lo calificó de «realista y prudente» y citó la reducción de 200.000 euros con respecto al año pasado. Puso el acento en el gasto social, visible en la partida de Servicios Sociales, que registra un incremento. Y resaltó los 580.021 euros a cargo del Concello destinados a inversiones, a los que sumó 4 millones de euros que aportan otras administraciones.
Alonso hizo un repaso a partidas como las destinadas a sufragar la atención a 105 usuarios de la «axuda no fogar»; el canon de la piscina climatizada (unos 96.000 euros al año); el mantenimiento de las subvenciones nominativas y la reducción de las de concurrencia competitiva; proyectos y mejoras en el alumbrado público, calles, la pavimentación del cementerio; la segunda fase de rehabilitación de la Torre de O Castro, reformas en el Teatro Lauro Olmo; la transformación de la Avenida del Bierzo y la restauración de las gradas del campo de fútbol de Calabagueiros, entre una larga lista de actuaciones.
También subrayó la clara implicación del Concello de O Barco por los sectores más aquejados de la pandemia como el comercio y la hostelería, recordando la campaña de las tarjetas «MaisBarco» y la exención en el pago de tasas de las terrazas a la hostelería en 2020 y 2021.
El portavoz socialista dejó claro que el presupuesto es sinónimo de gestión, después de la críticas lanzadas por PP y Riada Cidadá en alusión a la inclusión de las aportaciones de las distintas administraciones. «Si añadimos lo que aportan otros organismos ajenos, a eso se le llama gestión», apostilló.
Sabina Aguado (PP): «No vemos ni una sola idea nueva»
Y llegó el turno de la oposición. La portavoz del PP, Sabina Aguado, lamentó que en un pleno de tal trascendencia como es el de los presupuestos se añadiesen a la orden del día cinco mociones «de contenido político ,cuando se podrían haber sido tratadas en cualquier otro momento del año». Expuso la «desagradable sensación» del grupo municipal del PP de que o bien «no se le da importancia a los presupuestos, o no se quiere que nosotros le prestemos atención».
Reprochó que en 2020 los presupuestos fuesen llevados a pleno en el último trimestre del año y que, en esta ocasión, llegan «tres meses después de iniciar el ejercicio para el que se aprueban». Además, calificó de «poco elegante» que se hubiesen presentado a los medios de comunicación, antes que a la oposición, aún cuando sea factible por contar el grupo de gobierno con mayoría absoluta.
«Tildar estos presupuestos de continuistas sería muy optimista. No vemos ni una sola idea nueva, ni en el terreno industrial, ni comercial ni en el rural. Todo lo nuevo se debe a las aportaciones de otras administraciones», manifestó Sabina Aguado.
La portavoz del PP habló que «vuelven a traerse algunas inversiones que ya iban en 2020». Eso sí, se alegró de que haya una partida para inventario municipal que «se llevaba pidiendo desde los distintos grupos políticos». También mostró su satisfacción de que, «por fin, se arreglen las bancadas del campo de fútbol».
Lamentó que las inversiones «más importantes no sean aportación del Ayuntamiento», sino de otras administraciones. Y felicitó al Concello por la iniciativa «MaisBarco», ofreciendo la colaboración del PP en todo lo que tenga que ver con la dinamización económica de O Barco. «Nos gustaría haber visto en este presupuesto una partida con la misma finalidad», añadió, al tiempo que consideró «insuficiente» no cobrar las tasas de terrazas de la hostelería en la ayuda al sector.
Sabina Aguado también expresó su «disgusto porque, desde hace tiempo, no se convoca la Comisión de Sanidad. Nos gustaría colaborar con el concejal de Sanidad aportando ideas que puedan repercutir en nuestros vecinos de modo que se sientan más acompañados», teniendo en cuenta que son tiempos «perpetuos» de pandemia.
Finalmente, echó en falta una partida para el estudio de yacimientos arqueológicos, la recuperación del Área de O Salgueiral y el museo en los terrenos de Cedíe
Suso Vilasánchez (BNG): «Es incierto y convulso»
El concejal del BNG, Suso Vilasánchez advirtió que el presupuesto de O Barco es «incierto y convulso» y que no respeta los principios de prudencia de la previsión de ingresos. «Somos demasiado optimistas y eso puede descapitalizar el Concello», expresó.
Ejemplificó que se prevén unos ingresos de 20.000 euros para «puestos y barracas, cuando nadie sabe cómo será la situación sanitaria, por ejemplo, en las Fiestas de O Cristo». Y remarcó que «solo podemos pedir prudencia y máxima preocupación por las necesidades sociales en este tiempo de crisis».
Puso por delante la abstención porque «lo que no vamos a hacer en estos tiempos es un circo«.
Félix García (Riada Cidadá): «Retrocede en inversiones»
Por su parte, el edil de Riada Cidadá, Félix García, rechazó las cifras del grupo de gobierno socialista. «Parece más un balance electoral que una descripción de los presupuestos», valoró, porque, —añadió— «mezcla las partidas presupuestarias con las aportaciones de otras administraciones».
En este sentido, dijo que «retrocede en inversiones». Cuantificó en 490.000 euros las inversiones municipales, que se traducen un 5,8 % del presupuesto. Este porcentaje «está muy lejos del 6,4 por ciento de 2020 y más lejos todavía del 12 por ciento que se destinaba a inversiones en 2017 cuando lo ideal es que las inversiones municipales llegasen al 20 por ciento».
Rechazó los gastos en obras en la Casa de la Cultura porque «todos los años los hay, con ello se hacía una Casa de Cultura nueva».
Y reprochó al grupo de gobierno que no se replantee la posibilidad de municipalizar empresas como la del servicio de la recogida de basura o la piscina climatizada.
Alfredo García: «conseguir fondos es un mérito»
El alcalde, Alfredo García, quiso matizar en el pleno de los presupuestos las críticas alusivas a las aportaciones de las administraciones. «Parece como si fuera una deshonra que el alcalde o el grupo de gobierno consiga firmar convenios con otras administraciones para obtener fondos».
Recordó que no es la primera vez que se presentan mociones para solicitar ayuda económica de otras administraciones. «Da la impresión que cuando es el Concello el que consigue el dinero, está mal, cuando está muy bien. Porque si se leen informes de Intervención, queda claro que la presión impositiva o fiscal que tiene el Concello de O Barco es baja. Y por tanto, lógicamente, los impuestos dan para lo que dan».
Añadió que lo que tiene que debe hacer un alcalde y el grupo de gobierno «es romperse la cabeza para ver quién pone los fondos . Y esto está funcionando bien porque todos los años conseguimos que otras administraciones inviertan en O Barco sin pedirles dinero a los vecinos del municipio».
Alfredo García llamó a la oposición a ser objetiva esta cuestión. Obtener fondos de otras administraciones «entra dentro del mérito y no del demérito», concluyó.
Socialistas, Riada Cidadá y BNG apoyaron una moción conjunta por la modificación del modelo eólico. El PP la rechazó aludiendo a la necesidad de mayor tiempo para estudiar un tema tan complejo, que podría tener un impacto negativo en O Barco. En este punto, el alcalde, recordó, que se llevaba estudiando el asunto un mes y medio, después de ser trasladado, incluso a plenos y comisiones.
El pleno también acordó rechazar la modificacíon de la Lei de Saúde (en este caso con el voto en contra del PP), reclamar vacunas contra la Covid-19 para colectivos fuera del censo sanitario (presentada por el BNG) y apoyar las reivindicaciones del 8M.