CUFA afianza la excelencia de su marca en el sector de la construcción

Pablo Israel Rodríguez López, el "alma" de CUFA
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Pablo Israel Rodríguez López: «Estamos apostando fuerte por la obra pública y privada con el reto de seguir creciendo»

CUFA escala nuevos peldaños en su clara y decidida apuesta por la evolución y crecimiento del grupo empresarial, líder colocación de cubiertas, fachadas ventiladas y aislamiento; obras de construcción y rehabilitación, además de punto de venta de materiales —Alcupi—.

CUFA, marca reconocida y de referencia en el sector, con base en O Barco y proyección nacional, avanza imparable. Impulsa su especialidad de Obras y Proyectos, integrada por un equipo de profesionales que, bajo la supervisión de un ingeniero, cumple las exigencias y «sueños» de sus clientes, que no tienen que ocuparse de nada, tan sólo de elegir la reforma o nueva construcción deseada.

Un plantel de técnicos traza planos, propuestas técnicas y diseña la distribución de espacios; asesora en la elección de materiales y calidad, además de tramitar la documentación necesaria. Ofrece así una solución ágil y eficaz para cada cliente.

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Una de las «banderas» de CUFA es su compromiso con el entorno. Facilita la vuelta al medio rural, un fenómeno en alza durante esta pandemia, con la restauración, aislamiento y dotación de confort de viviendas y todo tipo de inmuebles.

Contribuye a la revitalización de los pueblos y el sector vitivinícola con la rehabilitación y construcción de bodegas, acorde al medio natural y la arquitectura tradicional. Ejecuta reformas y obra nueva, tanto pública como privada. Y todo ello con las ventajas de la máxima calidad, sostenibilidad y eficiencia energética.

La empresa líder en la instalación de cubiertas, potencia el sector de la pizarra, el elemento natural por excelencia de Valdeorras, además de contribuir a la continuidad del oficio de «colocador», contando entre su personal varias generaciones de colocadores.

CUFA también innova, incorporando lo último para el aislamiento de viviendas, atendiendo así a una demanda al alza de fórmulas que permitan el ahorro energético.

Pablo Israel Rodríguez López, el «alma» de CUFA, valora cómo ha sido los últimos meses de la actividad de CUFA, en un contexto en el que las obras de rehabilitación y aislamiento ganan terreno. Ahora se pasa más tiempo en casa debido a la situación epidemiológica. Y CUFA aporta su granito de arena en la mejora de la calidad de vida.

¿Cómo ha sido el año 2020 para CUFA a raíz de la irrupción de la pandemia?

No nos ha ido mal, a pesar de que 2020 se presentaba muy «negro». Hemos trabajado igual. Tan solo paramos los 8 días obligados durante el confinamiento. Eso sí, el trabajo tuvo otras dificultades, pero fluyó al mismo ritmo. Hubo un esfuerzo mucho mayor de nuestros operarios, pero el mismo volumen de trabajo.

Esfuerzo derivado de las propias limitaciones marcadas por los nuevos tiempos COVID…

Exactamente. Dificultades con los protocolos y el temor al virus. No podemos darnos la mano, hay que respetar la distancia, comer separados etc. Fue y es duro. Empezamos la pandemia con mucho miedo. Después hubo una mejoría, quitamos ese miedo y lo volvimos a tener y así sucesivamente. Ahora estamos asustados con la tercera ola. El coronavirus no pasa. Antes de Navidad había esperanza y hemos vuelto a atrás. La pandemia afectó a todo el mundo negativamente. Que los números digan que no hemos perdido no significa que no tuviésemos que esforzarnos más. Fue muy complicado para sacar el mismo resultado.

El fenómeno del regreso al medio rural para apartarse del virus está ahí, ¿CUFA ha cubierto demanda en este sentido?

Mucha gente regresó al rural, sí, aun cuando pienso que tarde o temprano acabarían arreglando las casas, con o sin virus. Tuvimos mayor actividad y demanda en el rural, pero tampoco un volumen mucho mayor a la de otros servicios que realizamos. Hubo trabajo, sí. Gente que cambió cubiertas o que realizaron una reforma integral. Hay personas que volvieron a los pueblos y que teletrabajan. Pero también es verdad que no se están haciendo casas nuevas. En 2008 sí que se construyeron viviendas.

¿Qué prima en la demanda para la rehabilitación de viviendas?

Ahora se está moviendo el ahorro energético. Todo el mundo insiste en el aislamiento para ahorrar en calefacción y electricidad. La mayoría de las reformas van orientadas a aislar y proteger para tener una calidad de vida que antiguamente no había en las casas. Muchas casas aún no están preparadas o aisladas. Cambiar cubiertas y ventanas hoy es sinónimo de ahorro energético.

El clima es cada vez más extremo con grandes nevadas, olas de frío y calor, ¿CUFA tiene la solución?

Llegamos a la globalización. Una casa de Andalucía y de Galicia antes no tenían nada qué ver. Ahora, son casas muy similares. Esto no hay quien lo pare. Antiguamente dormías al desván y ahora se llama dúplex. Valdeorras no está hecha para dúplex debido al clima: en verano mucho calor y en invierno mucho frío. Desde CUFA aconsejamos soluciones. Tenemos un ingeniero para procurar la mejor solución de confort a los clientes. Aquí no había una tradición en aislamiento porque la gente pasa mucho tiempo fuera de casa. Ahora, con la pandemia está cambiando.

La rehabilitación y construcción de bodegas de vino son son casi un «sello» propio de la «casa»…

Hemos acometido varias obras. Se está apostando por Valdeorras, también empresarios foráneos.

¿Cuál es su deseo?

Dejar de llevar mascarilla y volver a una vida normal. Los beneficios los cambiaríamos por una vidal normal. Desde el punto de vista profesional, seguimos creciendo y formándonos. Ahora mismo tenemos un grupo de construcción formado, con un ingeniero al frente. Estamos apostando fuerte y llevando el grupo empresarial hacia ahí. Ejecutamos obra pública y privada.

Ha elevado CUFA a su máxima expresión, ¿cuál es su proyecto?

Mi proyecto es posicionar cada vez mejor a la empresa, es decir, la estabilidad. Somos una empresa joven que sigue creciendo para llegar a ser un referente estable. Mi proyecto es que CUFA sea aún más CUFA.

Rehabilitación y construcción de bodegas de vino

La rehabilitación de bodegas de vino es ya un sello propio de la empresa. La obra más reciente la acometió en Seadur (Larouco) para la conocida firma Pago de Capellanes. Se trata de una nueva nave de almacén incrustada en la montaña para embotellar el vino y almacenar, con temperaturas idóneas para esta actividad y el diseño de un arquitecto italiano.

En este caso, se ha hecho un servicio integral con la excavación, cimentación y paredes. La actuación fue complementada con una especie pérgola, acorde con el entorno, para aparcamiento de tractores y colocación de aperos. Una obra diez que contribuye a la promoción y desarrollo del sector vitivinícola.

Sustitución de tejados de «uralita» en colegios

CUFA también marca la diferencia en obras públicas. La sustitución de las cubiertas de fibrocemento («uralita») en colegios como el de Baños de Molgas, Villablino (León), Viana y Cualedro, son solo algunos ejemplos. Muchos centros escolares todavía conservan el citado material, catalogado según algunos estudios como cancerígeno. CUFA sustituye cubiertas insalubres por otras saludables.

En su reciente historial de obra pública también figuran otras mejoras como la dotación de vestuarios en las piscinas del Puente Domingo Flórez, una parada de autobús en Carballeda de Valdeorras, la remodelación de la Plaza de Castañeiras (en Vilariño de Conso), la rehabilitación de instalaciones deportivas en O Barco o la vieja escuela de Vilariño (O Barco), entre otras.

Demanda de cubiertas de pizarra «a granel»

CUFA es el grupo empresarial de referencia en la colocación de pizarra natural en cubiertas y fachadas. Las cubiertas con pizarra «a granel» registra una elevada demanda, principalmente para edificaciones rústicas. No hay que olvidar que la pizarra es un material noble, natural y muy resistente.

Viviendas más sostenibles

CUFA rehabilita y construye nuevas viviendas al gusto del cliente. Eso sí, cada vez más sostenibles y acordes a los nuevos criterios, preparadas para incorporar sistemas de geotermia, paneles solares u otros acordes con el medio ambiente.

(CUFA se emplaza en la Avenida de Galicia, número 57 de O Barco de Valdeorras. Cuenta con una amplia gama de servicios de instalación de cubiertas de pizarra y fachadas ventiladas, punto de venta de material y ejecución de proyectos tanto de obra nueva como reformas)

Recordamos la historia del promotor de CUFA en el siguiente artículo: