Alfredo García: «Hay un proyecto ilusionante para reforestar y reordenar las zonas incendiadas»

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El alcalde de O Barco explicó en el pleno las medidas que emprenderá Medio Rural a partir del 15 de septiembre

El alcalde de O Barco, Alfredo García, dio a conocer en el pleno un proyecto para la reforestación y reordenación del territorio quemado en el municipio de O Barco alentado por la Consellería de Medio Rural que calificó de «ilusionante» y que será debatido próximamente con las comunidades de montes y ayuntamientos afectados por el fuego.

El alcalde dijo que a partir del 15 de septiembre, en las zonas localizadas con escorrentías y pendiente, se aplicará la denominada técnica del mulching, que permite crear una cubierta protectora del suelo empleando materiales como la paja.

Además, serán talados todos los árboles en las zonas quemadas, se retirarán todos los restos y se triturarán. «El objetivo es que no quede nada en el monte, para que no se pudra ni provoque enfermedades», puntualizó.

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Recordó que el conselleiro de Medio Rural ya se reunió en los últimos días con las comunidades afectadas por los incendios de O Barco, Rubiá y Carballeda y que habrá próximamente otra reunión para debatir el nuevo proyecto de reforestación y reordenación del territorio dirigido no solo para las comunidades de monte en mano común sino también para terrenos particulares.

«Desde el día del incendio, el conselleiro de Medio Rural prácticamente se vino a vivir a O Barco. Estuvo aquí todos los días», señaló el alcalde reconociendo la implicación de José González con Valdeorras y en la búsqueda de soluciones contra los incendios.

El alcalde de O Barco dijo que «hay que cambiar el modelo» para la prevención de incendios. «Llegó el fin de grandes hectáreas de pinos. Es el momento de organizar el monte en cuadrículas, de modo que se alternen especies arbóreas diferentes, sotos, zonas de pasto etc. No se puede evitar que arda el monte, pero sí hay que planificarlo de tal forma que, cuando se declare un gran incendio, se pueda tener lugares donde esperarlo y que no avance kilómetros», desgranó Alfredo García.

Si se logra ese objetivo, y a medio plazo, «podríamos incluso decir que el incendio de julio mereció la pena», valoró Alfredo García, haciendo alusión a un nuevo punto de partida en la reordenación del monte.

También recordó las reunión mantenida por Medio Rural con los comuneros y alcaldes y citó que el 29 de agosto finalizó el plazo de subvenciones de la Consellería de Medio Rural. «Ya se dijo que si no tienen la documentación, que presentasen igualmente la petición porque la pueden adjuntar a posteriori, durante el procedimiento».

Nueva reuniones del Concello con las comunidades de montes

El Concello está realizando proyectos para arreglar caminos de las localidades afectadas por los incendios. De hecho, el concejal de Medio Rural y el aparejador visitarán las comunidades para realizar una relación de todos los senderos de la franja incendiada (Alixo, Millarouso, Santigoso, Vilariño etc.) a fin de diseñar el presupuesto, al tiempo que se cofinanciarán obras si es preciso con la Xunta. No escatimará en cualquier tipo de colaboración contra el fuego.

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Alfredo García detalló que ya se han supervisado captaciones como las de Vilariño, Alixo y Candís y la buena noticia es que en las dos primeras «no hay que hacer nada porque no se movió nada, además de comprobar que está rebrotando la zona».

Además, anunció que se reunirá con vecinos y comuneros de Viloira y Vilariño para que todo el frente de ambas localidades «esté plantado», como barrera contra incendios. «Si hubiésemos plantado viñedo en esa franja no hubiese pasado el fuego de los incendios. Eso está claro», concluyó.

También mantendrá reuniones con los de Alixo y Vilariño para abordar nuevas plantaciones «y no de 20 hectáreas pues ya vimos que son pocas, sino grandes extensiones».

Y recordó el hándicap que existe en esta materia: «Los propietarios pueden ceder las parcelas pero después hay que encontrar gente que quiera trabajar la tierra. Esta es ya otra historia. Pero ese es el camino y por el que vamos a trabajar».

Y recordó cuando en Alixo se puso a disposición del Agader más de 100 hectáreas para sembrar centeno. «No encontré a nadie, ni dentro ni fuera. Y hubo incontables reuniones. A ver si ahora, Medio Rural encuentra a personas de fuera para personas que quieran sembrarlo. Ni siquiera los cazadores».

Confía en que a raíz de los incendios, «ya se le hayan visto las orejas al lobo y tal vez pueda ser más fácil la apuesta por trabajar las tierras».