Representantes de los 32 ayuntamientos que la integran mantuvieron una reunión en O Barco para avanzar en el proyecto cuyo trazado definitivo llegará en 2023
La Gran Senda del Sil avanza. Une Galicia y León en el terreno turístico a través de más de 200 kilómetros desde la Cueta hasta Os Peares, pasando por Valdeorras. Los representantes de la treintena de ayuntamientos que la integrarán mantuvieron una reunión en O Barco para abordar los primeros pasos del proyecto, promovido por la asociación El Sil Sí, que preside Julio Rubial.
En este encuentro, al que acudió también Rosendo Luis Fernández como representante de la Diputación de Ourense, se puso sobre la mesa las acciones más inmediatas para diseñar el proyecto definitivo del trazado de la Gran Senda del Sil, que discurrirá por 32 municipios, así como la necesidad de implicación de diversas administraciones y la financiación, para la que también se recurrirá a Europa.
El alcalde de O Barco, Alfredo García, nombrado coordinador social del proyecto —a fin de facilitar la comunicación entre los ayuntamientos—, expresó que será fundamental la labor de la Diputación en este proyecto para poner de acuerdo a los integrantes del proyecto así como iniciar de forma exitosa el proyecto.
Buena predisposición y la decisión firme de avanzar en el proyecto fueron la tónica dominante de la reunión.
La idea —puntualizó— es implicar además al mayor número de administraciones y organismos, entre ellos la Xunta de Galicia y la Confederación Hidrográfica Miño-Sil. «Es preciso que este proyecto sea declarado de interés general», apuntó.
Por su parte, el presidente de Sil Sí, Julio Rubial, mostró su satisfacción por la amplia representación de ayuntamientos de León y Galicia en la reunión, al tiempo que recordó la idea de contar con el reconocimiento de esta Gran Senda como un camino y red de senderos natural como fuente de atracción turística.
Valdeorras cuenta con una gran ventaja, algunos de los caminos por los que discurriría el trazado están acondicionados.
La Gran Senda del Sil aspira a dinamizar uno de los mayores recursos naturales de ambos enclaves, el entorno del río Sil.
