«Es la primera vez que la presa de Valencia do Sil nos puso en un aprieto»

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Los vecinos de las casas situadas junto a la presa explican que no tuvieron miedo pero que ahora ha brotado la desconfianza

El episodio vivido en las últimas horas debido a la rotura de una de las compuertas de la presa de Santiago, en Valencia do Sil (Vilamartín), fue vivida con especial intensidad por los vecinos y vecinas que tienen situadas sus casas a escasos metros de la misma. «Es la primera vez que la presa nos puso en un aprieto», manifestaron.

Ocurre que con la habitual suelta de caudal alguna vez sí se ha producido que el agua llegase hasta alguna vivienda, pero nunca, «jamás, estuvimos en peligro como ahora», valoran. Eso sí, no llegaron a temer porque fueron testigos de cómo evolucionó el impacto del incidente.

«El caudal subió pero no llegó a los caminos ni a las carreteras , de modo que no tuvimos miedo», explica Bautista Fernández Garrido, vecino de Valencia do Sil cuya casa está al lado de la presa. A partir de ahora, «sí que tendremos desconfianza», añade, en alusión a que si pasó esta vez ¿quién sabe si volverá a ocurrir?

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Relata como sucedió: «Sentimos un ruido fuerte y pensamos que había caído un coche o un camión al agua. Y ya vimos qué había pasado. Pusieron otra compuerta. Los técnicos de Iberdrola estuvieron toda la noche en la presa», cuenta Bautista Fernández, quien reside en el pueblo desde la década de los 70 y «nunca pasó algo así», subraya reseñando el impacto que tendría en otra época y hora. «Aquí vienen a pescar muchos pescadores», detalla.

También a unos metros de la presa reside Esther Alijo, quien cuenta que «desde casa sentimos un ruido como si alguien arrastrase unas chapas. Entonces, salimos y ya vimos que salía a chorro agua, pero no llegó a causar ningún daño. Estuvieron trabajando los técnicos por la noche. No tuvimos miedo porque vimos que el problema ya lo estaban solventando».

Cientos de fotografías en la presa de Valencia do Sil y en A Rúa

El incidente en la presa de Valencia do Sil desató incontables visitas de personas movidas por la curiosidad, una especie de «turismo» para ver in situ la presa.

La presa más fotografiada, en Valencia do Sil

«Fue un día de paso continuo de gente», dijo Germán Granja, vecino de Vilamartín que acudió a visitar a un tío en Valencia do Sil, relatando que hoy no se habla de otra cosa en el municipio. «No se concibe cómo pudo pasar algo así», expresó.

Un día de trasiego y visitas continuas en las que se inmortalizó la presa de Valencia do Sil y su compuerta varada en el río Sil en A Rúa.