Alerta por la presencia de jabalíes, corzos y lobos en las carreteras

Lobo atropellado en la A-52
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La Guardia Civil detecta una mayor incidencia de animales salvajes y un incremento de atropellos y accidentes

La Guardia Civil detecta una incidencia mayor de jabalíes y animales salvajes en las vías de comunicación. El confinamiento motivado por la reciente crisis sanitaria del COVID-19 y, por tanto, la menor presencia de personas en el entorno, puede ser una de las causas, según estima Tráfico, de que determinadas especies ocupen nuevos espacios.

Dentro de las especies cinegéticas, el animal más habitual y más presente en atropellos es el jabalí, con 106 casos de atropellos registrados en la provincia desde el inicio del estado de alarma. Además, destaca la irrupción de estos animales muy cerca de los núcleos urbanos.

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Al jabalí, le sigue muy de cerca, en lo que se refiere a a atropellos, el corzo con 69 casos de atropellos constatados en las vías ourensanas. Zorros, conejos, liebres e incluso un tejón vienen a completar la lista de animales salvajes que han originado siniestros viales.

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Recientemente, se constató un atropello de un lobo a la altura del punto kilométrico 120 de la A-52.  Respecto a las dimensiones del animal, de mayor alza que un pastor alemán común, pudiera tratarse de un ejemplar perteneciente a alguna manada localizada recientemente en tierras zamoranas que pudo haber sido desterrado de la misma por ejemplares más jóvenes, o bien que hubiese ampliado su territorio. Desde 2014, se registraron 10 atropellos a lobos, las tres más recientes tuvieron lugar en N-525 y la A-52, en puntos muy próximos al territorio de Zamora y otros 2 en un radio próximo a tierras de Trives. No obstante, ninguno de estos 10 ejemplares alcanzaba las dimensiones del éste último.

  La Guardia Civil realiza las siguientes recomendaciones a la hora de circular por las carreteras:

  • Es necesaria una conducción preventiva y consciente, y un básico conocimiento de los comportamientos animales.

Cabras montesas, ciervos y jabalíes son animales que se desplazan preferentemente en el atardecer o ya de noche. En la mayoría de los casos las madres con sus crías pero también grupos enteros. De ahí un primer dato: cuando veamos un primer corzo o un primer jabalí, podemos esperar que le sigan un segundo, un tercero, tras el animal que va en cabeza.

  • Las zonas de caza son otro de los puntos críticos en que debemos extremar nuestra atención pues hay desplazamientos importantes de animales, durante el momento de la caza (domingos tarde) y después, con el retorno de los animales a su territorio (los lunes).
  • Si el impacto es inevitable “es preferible un choque controlado que una maniobra de evasión incontrolada”. En caso de irrupción del animal desde un margen de la calzada, no se debe realizar una maniobra evasiva brusca. Si se dispone de ABS, la frenada debe ser firme y sostenida, de lo contrario deberá ser suave y acorde al trazado mantenido con la dirección para evitar un derrape no deseado.
  • Si el atropello no ha podido ser evitado: Hay que detenerse donde no obstaculicemos el paso y encender las luces de emergencia, ponerse el chaleco reflectante y asegurar la zona con el correspondiente triángulo de avería. Si el animal ha huido, marcaremos la zona del accidente, tanto sea un animal silvestre como doméstico, avisaremos de inmediato al 112, a la Guardia Civil o a la Policía. Si el animal está muerto y hay que moverlo, siempre agarraremos por las patas posteriores. Si el animal está herido, hay que tener mucho cuidado. Si es un animal silvestre, no debemos acercarnos: la proximidad de las personas agrava su estrés, dolor y angustia y puede reaccionar con agresividad. Debe hacerlo un especialista.