Se trata de un plan de la Xunta que comenzará en primavera y servirá también de herramienta contra la prevención de incendios
La Xunta ejecutará la segunda fase del Plan de Pastos de Galicia la próxima primavera para poner en valor un total de 30 montes vecinales pertenecientes a 24 ayuntamientos gallegos. La inversión programada se acerca a los 4 millones de euros y la superficie de la actuación rondará las 744 hectáreas, de las que casi 178 corresponden al territorio de Ourense. En este caso, los ayuntamientos ourensanos que se beneficiarán son A Veiga, Vilariño de Conso, Allariz, Xunqueira de Espadañedo, Lobeira, Laza, Maceda y O Irixo.
El plan busca promover un mejor aprovechamiento de los recursos naturales para trabajar en la anticipación a los incendios forestales y garantizar la rentabilidad de las explotaciones, al facilitar más base territorial y proporcionar nuevas herramientas para generar oportunidades de riqueza en el rural.
Así lo dio a conocer el conselleiro de Medio Rural, José González, durante una visita a Lucenza (Cualedro) para conocer los trabajos realizados al amparo de la primera fase del plan de pastos de Galicia.
José González señaló que, en el marco de la futura Ley de recuperación de la tierra agraria de Galicia, es preciso convertir el rural gallego en un territorio resistente a los incendios forestales mediante la instalación de actividades económicas como, en este caso, la ganadería en extensivo y otras iniciativas que permitan anticiparse a los fuegos, como pueden ser los distintos instrumentos de movilización de tierras que ofrece esta futura norma.