Enrique Fernández: «La pintura es mi auténtica vocación»

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El mundo interior de «Enris» aflora en 22 cuadros en una exposición, «Dende a emoción», que inaugura hoy en el Casino barquense

Enrique Fernández Prada inaugura hoy una exposición de pintura en el Casino de O Barco, a las 20,00 horas, titulada «Dende a emoción». Se trata de una selección de obras realizadas en diferentes etapas cuyo hilo conductor es el mundo interior y la realidad del lugar en el que vive el autor. Es un recorrido intimista cargado de emociones, colorido y la ilusión del porvenir.

Enrique Fernández Prada, de O Barco, estudió Comunicación Audiovisual y trabajó en este último campo, en el ámbito del diseño digital en Madrid. Sin embargo, su vocación real es la pintura y llevó a cursar también estudios de Bellas Artes en Pontevedra. También hizo Escultura Digital, aún cuando «no me considero escultor, sino pintor».

Esta es su segunda exposición en O Barco y ha realizado otras en diferentes ciudades españolas, además de estar recientemente en la exposición Marco de Petín.

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El artista anima a visitar su exposición, que consta de 22 cuadros al óleo en tabla y lienzo; acuarela y técnica mixta. Se puede visitar en el Casino de O Barco, los viernes y sábados, de 19,00 a 21,00 horas.

Valdeorras de Cerca: Dende a Emoción, un título sugerente

Son cuadros de diversas etapas. Constituyen un «viaje» no solo pictórico sino también vital que representa la transformación desde un estado a otro, que tiene como punto final O Barco. Hay autorretratos, pinturas de O Barco y aquellos que hacen referencia al mundo interior como, por ejemplo, la Bella y la Bestia o una flor que se transforma. Trato de reflejar a mis seres queridos, el lugar en el que vivo y el mundo interior. Es una especie de recorrido psicológico. Cuando pinto, lo hago por las emociones, siempre hay algo sentimental.

VdeCerca: ¿Qué supone para ti esta exposición en el Casino de O Barco?

Mucha emoción porque significa exponer para gente muy cercana, mis amigos, familiares y vecinos. Expuse en Madrid y Segovia pero O Barco es mi tierra y entraña dar a conocer quién eres, tu trabajo y cómo ves el mundo. Esto para mí es también un reto.

VdeCerca: ¿Cuánto tiempo llevas pintando?

Llevo toda la vida. En serio, desde 2014. Hice Bellas Artes en Pontevedra. Estuve en Canadá un año y también en Sevilla. Acabé la carrera en 2018. Con anterioridad hice Comunicación Audiovisual y, de hecho trabajé en empresas de publicidad, de diseño gráfico. Dejé todo en Madrid para apostar por la pintura, amigos y trabajo, porque aquello no me llenaba del todo, me faltaba algo, a mí me llamaba pintar. La propia vida me fue llevando a la pintura. Y la llamada o vocación del arte pudo más. La pintura ha estado siempre presente en mi vida. Cuando era pequeño ya hacía carteles, ganaba concursos de pintura, pero nunca pensé que me iba a dedicar a ello, era un sueño.

VdeCerca: ¿Cómo te defines como artista?

Me gusta partir del arte figurativo y realista para interpretarlo y distorsionarlo. Empleo muchos colores puros y alegres, buscando la emoción del color. Antes de hacer una obra, pienso mucho cómo abordarlo, lo preparo a conciencia.

VdeCerca: ¿Qué es el arte para tí?

Es una necesidad que ayuda a sacar lo que tienes dentro, una forma de comunicación con el entorno.

VdeCerca: Existe un nexo entre Comunicación Audiovisual y Bellas Artes…

La creatividad y narrativa está presente en ambas carreras. Mi trabajo en comunicación audiovisual, en el campo del diseño gráfico, era dinámico, exigía una inmediatez, una tarea creativa, social y al mismo tiempo muy técnica. Pero a mí me gustaba más el sentido poético, reflexivo y romántico de la pintura; analizar colores y formas, de ahí mi inclinación final hacia la pintura, que es una tarea más humanizada, reposada y en la que encuentras tu propio corazón, tu ser, tu interior, lo que llevas dentro.

VdeCerca: ¿Cuál es tu proyecto?

Estoy negociando una exposición en El Bierzo, pero todavía no ha sido cerrada. Me hace ilusión porque sería colectiva, con un grupo de amigos de Ponferrada que también se dedican a la pintura, pues sería una forma de compartir esta experiencia. Mi idea es seguir creando pintura aún cuando la vida podría llevarme por otro camino. La vida es un constante cambio y evolución, una aprendizaje continuo con experiencias enriquecedoras.