La Confederación Hidrográfica Miño-Sil invita a la gestión y uso responsable de un recurso natural, finito e imprescindible para la vida
El 22 de marzo se celebra el Día Mundial del Agua, una fecha marcada en el calendario, desde hace 30 años, a iniciativa de Naciones Unidas para concienciar sobre el valor del agua, un «recurso natural, finito e imprescindible para la vida», expone la Confederación Hidrográfica Miño Sil invitando al reto conjunto para la gestión y uso responsable que garanticen un bien esencial que en el Planeta es escaso. Cada gesto individual cuenta, y mucho, para la conservación un bien tan preciado como escaso.
El agua es el motor de la vida pero también el recurso clave para el progreso de la humanidad. Hoy, unas 2.200 millones de personas en el mundo carecen de acceso al agua potable, un dato preocupante que reafirma su valor y la importancia del compromiso individual y colectivo para el uso cotidiano de un recurso esencial y limitado.
Aún cuando la reserva hídrica en la Demarcación del Miño Sil se encuentra al 73,6 de su capacidad, como consecuencia de las lluvias registradas en los últimos meses, el uso eficiente y racional del agua debe ser una práctica cotidiana independiente de la cambiante situación hidrológica.
Recomendaciones
Algunas recomendaciones para ahorrar agua, a nivel individual, pasan evitar dejarla correr durante hábitos cotidianos como lavar manos, fregar platos etc., utilizar ciclos cortos para lavadoras y lavavajillas, realizar duchas rápidas, utilizar electrodomésticos de bajo consumo, entre otras muchas.
Glaciares
Este año el tema elegido en el Día Mundial del Agua es la «Conservación de los glaciares», esenciales para disponer de agua potable y también para usos agrícolas, industriales y de producción de energía limpia, además de ser fundamental para la salud de los ecosistemas.
El rápido derretimiento de los glaciares provoca que los flujos de agua se vuelvan imprevisibles, lo que acarrea profundas repercusiones para el Planeta, según Naciones Unidas, que recuerda la necesidad de reducir las emisiones de carbono a escala mundial y adoptar estrategias locales para adaptarse al retroceso de los glaciares.
En este Día Mundial del Agua, se apela a un trabajo conjunto para que la conservación de los glaciares se convierta en un eje para hacer frente al cambio climático y a la crisis mundial del agua.
El agua importa y cada gota suma.
