Manuel Baltar fue elegido presidente de la Diputación de Ourense para el mandato 2019-2023, en la sesión plenaria celebrada en el Salón de Plenos del Pazo Provincial, en la que fue proclamado presidente por mayoría absoluta con los votos de su partido, el PP, y Democracia Ourensana.
Baltar remarcó que en este nuevo escenario político —en el que consigue la Presidencia de la Diputación de Ourense hay dos palabras que presiden intervención: humildad y reilusionar. «La forma más rápida de avanzar es reconociendo aquello que pudimos hacer mejor. Todos nos equivocamos y nuestra tarea es acertar en las decisiones y corregir los errores», dijo.
Baltar destacó que «reilusionar» implica «mostrar nuestra mejor cara, sorprender positivamente con nuestro gobierno». Reilusionar, añadió, «persigue que los hechos hablen por nosotros, tender puentes con personas e instituciones, siempre con un objetivo preferente desde esta Administración pública: los servicios que se prestan en los ayuntamientos de nuestra provincia». En este aspecto, indicó que la Diputación tiene que ser la gran consultora de los ayuntamientos de Ourense.
Baltar —que se expresó en gallego en todo momento— comenzó su intervención destacando: «Soy ourensano, creo en Ourense y siento pasión por Ourense». Dijo que el programa con el que se presentó para gobernar la provincia, se convierte en la hoja de ruta de este mandato «que defendemos con un objetivo: un mejor Ourense». Se mostró satisfecho del balance de los últimos cuatro años, con el desarrollo del Plan Ourense 2015-19, del que destacó como resultados «la deuda cero conseguida por la Diputación de Ourense; el liderazgo nacional en transparencia y la visibilidad de Ourense en los órganos de discusión y en foros nacionales e internacionales».
En su discurso, el presidente provincial puso la tilde en que «nuestra tarea común» es tener siempre a Ourense por encima de cualquier otro interés y aquí «sumaremos esfuerzos. Porque solo consiguiendo compromisos y consensuando proyectos, seremos mas fuertes en Santiago, Madrid, Bruselas y en los principales centros de poder político y económico, donde Ourense merece estar más presente. También en cualquier parte del mundo donde haya alguien de nuestra estirpe, porque la ourensanía no tiene fronteras», expresó Baltar.
Situando el diálogo y el acuerdo en el centro de su discurso, Baltar destacó que se debe aprovechar la renovación —13 de los 25 diputados— para llegar a acuerdos que superen cualquier intransigencia. También señaló que hay que elevar a Ourense, «poniéndola a la altura que le corresponde en una Galicia que, por supuesto, debe aspirar la mayores cuotas de autogobierno, como nacionalidad histórica, como nación cultural diferenciada, solidaria y generosa, en una España plural que avance y no retroceda».
Baltar citó a Méndez Ferrín, Basilio Álvarez y Marcos Valcárcel, refiriendo de ellos textos e iniciativa dirigidas al entendimiento y la concordia. «Pienso que debemos aprender de la Historia -afirmó-, pero fundamentándonos en el presente y proyectándonos en el futuro». Y dijo que sus ideales siguen siendo: centrismo, galleguismo, reformismo, municipalismo y europeísmo. En este mandato, recordó, la provincia conseguirá la ansiada condición de puerta de entrada del AVE en Galicia, «ejerciendo con más razón a capitalidad de la eurorregión Galicia-Norte de Portugal».
El presidente de la Diputación abogó por la política del pacto y del acuerdo, que se visualiza «con mi nueva investidura, de la que considero la más alta honra política: presidir Ourense». Añadió que es esa política del pacto la que «vinimos practicando para lograr la unanimidad en mi elección como presidente de Partenalia, la asociación europea de gobiernos provinciales, con presidentes de todos los colores políticos; como vicepresidente en la Confederación Europea de Poderes Locales Intermedios, o esta misma semana con la elección como presidente de la Asociación Europea de Ciudades Históricas Termales, unanimidad de gobiernos de 51 sitios termales de Europa que pertenecen a 20 naciones. Eso es diálogo y altura de miras, gestión política y liderazgo institucional. Eso es Ourense».
Manuel Baltar subrayó el orgullo de pertenencia a la tierra: «Hagamos Ourense desde la igualdad, pensando en el futuro de nuestra juventud y poniendo en valor el compromiso con esta tierra de emigrantes».
Sobre las perspectivas de la etapa 2019-2023, Baltar destacó que será este el mandato del Xacobeo 2021, en el que los caminos de Santiago que atraviesan Ourense cobrarán mayor protagonismo. «Consolidaremos a Ourense como la gran provincia termal de Europa; abrirá sus puertas el Centro Galego de Innovación na Formación Profesional y el edificio Provincia Intelixente, que acogerá más y mejor empleo tecnológico», destacó. Y valoró que «seremos Patrimonio Mundial de la UNESCO, distinción que ostentará a Ribeira Sacra, incrementando así el turismo de calidad».
La nueva Corporación provincial quedó integrada por rostros nuevos. Por Valdeorras ya son, ahora, diputados el alcalde de A Rúa, Álvaro Fernández, y el teniente de alcalde de O Barco, el socialista Aurentino Alonso.
