La lluvia no restó afluencia a una celebración tradicional que funde vino, gastronomía y etnografía
La Festa das Covas de Seadur (Larouco) registró un nuevo éxito demostrando que la climatología adversa no es obstáculo para vivir una celebración tradicional que funde vino, gastronomía y etnografía. Participaron unas 1.700 personas de Valdeorras y de otros puntos de Galicia.
Una larga hilera de personas hicieron cola bajo sus paraguas para entrar al recinto de las covas, aguaceros que apenas dieron un respiro pero que no consiguieron romper el espíritu festivo de esta celebración. «Covas sí o sí».
Dieciocho «covas» abrieron sus puertas para ofrecer pinchos, recuperando los platos de cuchara como garbanzos, callos y caldo, además de paella, «oreja», humus y diversas clases de embutido. Todo ello regado con el buen vino de la zona.
Este año una de las grandes novedades fue una «cova» para la promoción de los vinos de la Denominación de Origen Valdeorras, que se habilitó con la colaboración de Turismo de Galicia, y que sirvió «godello» combinado con pinchos.
El director de Turismo de la Xunta, Xosé Merelles, visitó la citada «cova» y recorrió otras en esta ruta de Seadur acompañado del director de Axencia Galega da Calidade Alimentaria, Martín Alemparte, y la alcaldesa de Larouco, Patricia Lamela.
La música acompañó en todas y cada una de las «covas» participantes, especialmente con agrupaciones en vivo, que animaron esta fiesta, organizada por la Asociación de Coveiros de la localidad.
Un día de «covas» que volvió a confirmar un nuevo éxito.