La ecoetiqueta que brinda información sobre el impacto ambiental del producto fue presentada hoy en Sobradelo
Día importante para el sector de la pizarra. Hoy presentó en la sede del Clúster, en Sobradelo (Carballeda), la renovación de Declaración Ambiental de Producto (DAP) hasta 2026, la «ecoetiqueta» que avala su compromiso con la sostenibilidad y el medio ambiente. Ha sido certificado con la marca DAPcons, que aglutina empresas fabricantes de productos y materiales que desean avanzar en los impactos medioambientales de sus productos.
A la presentación acudió la subdirectora xeral de Recursos Minerais, María Coutinho; el delegado de la Xunta, Gabriel Alén; acaldes y representantes municipales de Valdeorras, entre ellos la alcaldesa de Carballeda, María del Carmen González y el alcalde de O Barco, Alfredo García; la presidenta de AEVA, Araceli Fernández Del Palacio; la parlamentaria del BNG María González Albert así como un nutrido grupo de personas vinculadas al mundo de la pizarra.
Para la obtención de la Declaración Ambiental de Producto, los consultores analizaron datos de 25 empresas productoras integradas en el Clúster de la Pizarra de Galicia en el año 2020 y también de otras procedentes de Castilla y León.
El presidente del Clúster de la Pizarra de Galicia, Víctor Cobo, subrayó que gracias a esta Declaración Ambiental de Producto, los técnicos y profesionales del sector de la construcción «podrán seleccionar los tipos de pizarra según criterios medioambientales, más allá de los estéticos, económicos y funcionales”.
Para conseguir la certificación, se estudiaron determinados datos de la pizarra como producto tales como durabilidad y sostenibilidad ambiental, emisiones, consumo de energía y agua o eliminación de residuos, entre otros parámetros.
Así, en el estudio se realizó un análisis del ciclo de vida del producto pizarra “de la cuna a la tumba” y, tal y como explicó Víctor Cobo, “podemos concluir que la pizarra natural es más sostenible que otros productos sustitutivos utilizados en la construcción de cubiertas tales como el zinc, la teja o el fibrocemento”.
Por su parte, la subdirectora de Recursos Minerais destacó la importancia de esta ecoetiqueta y valoró la pizarra como un “sector crucial para nuestro desarrollo económico, un sector dinamizador del rural y que genera más de un 25% de empleo femenino”. María Coutinho también destacó la calidad y sostenibilidad de la pizarra.
El delegado de la Xunta, Gabriel Alén, habló de la importancia de la Declaración Ambiental de Producto de la Pizarra como la consolidación de un logro estratégico para el sector que «pretende mostrar objetivamente las bondades ecológicas de los productos de piedra, y más concretamente de la pizarra natural frente a otros productos para cubierta».
El delegado territorial subrayó que esta declaración reafirma la primera declaración ambiental (DAPc) a nivel nacional, de junio de 2013, promovida por la Federación Nacional de la Pizarra (FNP), la Asociación Gallega de Pizarristas (AGP) y el Colegio de Aparejadores, en colaboración con la consultora especializada ADAPTA SG y con la Dirección de Energía y Minas de la Consellería de Economía e Industria de la Xunta de Galicia.
Gabriel Alén explicó que esta proclamación recoge todos los datos ambientales de un producto durante su ciclo de vida: información sobre las emisiones de CO2, la cantidad de agua necesaria para producirlo o el agotamiento de recursos naturales.
«Todos estos datos, recogidos según normas internacionales, permiten comparar el índice contaminante de los distintos productos y familias de productos», añadió.
Y dijo que la Vicepresidencia segunda y Consellería de Economía, Empresa e Innovación y el Clúster de la Pizarra firmaron un convenio de colaboración en materia de sostenibilidad, que fructificó en la obtención de esta DAP sectorial que hoy se presentó.
El representante del Gobierno gallego recordó las exportaciones de pizarra gallega significan actualmente en torno al 95% de la producción española. En el año 2017, España exportó 475.117 toneladas (el 85% de las exportaciones mundiales), por valor de 253.986.501 euros. Por lo tanto, Galicia exportó 285.070 toneladas por valor de 152.391.900 euros, siendo los principales países consumidores de este producto gallego Francia, Reino Unido, Alemania, Benelux, Irlanda y Dinamarca.
Alén recordó que la pizarra da empleo directo la cerca de 2.500 trabajadores y de manera indirecta la alrededor de 10.000 personas, representando el 26% del producto interior bruto de la comarca; y concluyó poniendo en valor «la labor de este colectivo empresarial a favor de la dinamización del rural, y la contribución de la pizarra como una apuesta permanente por la innovación”.
Por su parte, la alcaldesa de Carballeda, María del Carmen González, señaló el peso de la pizarra en el desarrollo de Valdeorras, apostando al mismo tiempo «por la innovación y el empleo femenino”.
Se pronunció sobre los retos que debe afrontar el sector citando condicionantes del nuevo ciclo de Planificación Hidrológica en la Demarcación del Miño-Sil, refiriéndose en concreto a determinados artículos del nuevo plan, que “debe ser suprimidos, no podemos poner en peligro el empleo y viabilidad de muchas de nuestras empresas”.
Eduardo García fue el técnico que explicó a los asistentes todos los entresijos de las Declaraciones Ambientales de Producto (DAP) (Environmental Product Declaration (EPD), que aportan información cuantitativa de los impactos ambientales de un producto a lo largo de su ciclo de vida. Son conocidas como “Eco-etiquetas” tipo III. La información que contiene una DAP se basa en el análisis del ciclo de vida (ACV) de un producto.
Las Declaraciones Ambientales de Producto (DAP) se realizan conforme a la Norma Internacional ISO 14025, que define los requisitos que deben cumplir estas Declaraciones ambientales, incluyendo la verificación por tercera parte. Para productos de construcción, se emplea la Norma Europea EN 15804, que facilita el reconocimiento de la información ambiental de los productos de construcción en Europa, al constituir una referencia armonizada y reconocida.
Existen también las DAP sectoriales, como la conseguida por la pizarra, que muestran los valores medios de un producto con características funcionales similares. Éstas resultaran especialmente útiles para el técnico en la primera etapa de un proyecto en la que se requiere conocer el impacto ambiental de un producto tipo sin conocer el modelo ni la marca exacta.
