Dan las gracias a todas las personas que participaron en la manifestación del viernes, trabajadores, alcaldes, alcaldesas, partidos políticos, asociaciones, sindicatos y agentes sociales, además de personas anónimas que se han solidarizado: «Es una inyección de ánimo», dice el grupo empresarial
Las empresas pizarreras Irosa y Samaca quieren dar las gracias a las más de 3.500 personas que se manifestaron en O Barco de Valdeorras a favor del mantenimiento de su actividad y empleo. Tras la situación originada a raíz de la decisión judicial de proceder al desahucio de los terrenos en los que se erigen sus instalaciones, fuentes de la empresa lamentan que este conflicto, que afirman es auspiciado por la Junta de Montes en Mano Común de Portela y Trigal, pueda dejar sin trabajo a más de 300 personas lastrando la economía de la comarca.
Desde Irosa y Samaca, no obstante, afirman que la movilización social lograda y los mensajes de apoyo llegados desde diferentes partes de Galicia y de España procedentes tanto de personas anónimas como de representantes de todos los colores políticos y de agentes sociales y económicos de diverso tipo han supuesto “una inyección de ánimo”.
“El clamor popular, en una movilización multitudinaria con pocos precedentes en la zona, nos da la razón frente a aquellos que quieren destruir la economía de la comarca en base a intereses espúreos y personalistas”, añaden desde la empresa. “Lucharemos por poder restablecer nuestra actividad más pronto que tarde”, afirman.
Irosa y Samaca valoran, especialmente, la respuesta coordinada, unánime y común de los nueve alcaldes de Valdeorras (pertenecientes a los tres principales partidos gallegos, con representación parlamentaria) en contra del desahucio, así como también los mensajes públicos a favor del mantenimiento de su actividad llegados desde diferentes organismos y asociaciones tales como el Clúster da Pizarra de Galicia, AEVA, la CEO o el Centro Comercial Aberto de O Barco, entre muchos otros.
Al mismo tiempo, Irosa y Samaca agradecen a sus trabajadores, a los representantes sindicales y también a ex trabajadores de la pizarra de toda la comarca, así como a representantes de otras empresas, el apoyo manifestado.
Pero, sobre todo, Irosa y Samaca quieren agradecer a todos aquellos ciudadanos anónimos que se han solidarizado con el sector, al que han apoyado públicamente manifestándose —aún sin tener una relación directa con el ámbito de actividad de la pizarra— porque son conscientes de que se trata de un “motor económico de primer orden, generador de empleo en una comarca con una marcada impronta rural y vertebrador del territorio. Este apoyo ha sido el más inspirador de todos”, consideran desde Irosa y Samaca.
