Los fieles circularon bajo las andas de la imagen religiosa en el sentido inverso al desfile de la procesión tal y como establece la tradición
Lardeira (Carballeda de Valdeorras) celebró su procesión del Padre Eterno que, un año más, concentró a fieles procedentes de Valdeorras y la vecina provincia de León. Eso sí, en esta ocasión, la coincidencia con la celebración de la Virgen de la Estrella, en San Pedro de Trones, hizo que, aún siendo multitudinaria, hubiese menos devotos que el año pasado.
El obispo de Astorga, Jesús Fernández González, presidió la procesión acompañado del párroco Juan José Prieto.
La procesión del Padre Eterno es una de las más singulares de Valdeorras. Los devotos van circulando, uno a uno, por debajo de las andas que soporta la imagen religiosa, en sentido inverso al desfile de la procesión, una peculiaridad que en los últimos años pervivió en alguna otra localidad del municipio de Carballeda como Ricosende, Soutadoiro o Riodolas.
La devoción por el Padre Eterno está muy extendida. La imagen religiosa también llama la atención porque cuenta con tres cabezas que salen del mismo tronco, en alusión a la Santísima Trinidad.
La tradición de la procesión del Padre Eterno también entraña una peregrinación a pie que hay quien todavía sigue realizando desde otras localidades de Valdeorras.
